De vuelta en «John Wick: Capítulo 3», el asesino titular sacrificó su dedo para demostrar su lealtad a High Table, el oscuro grupo que supervisa la red internacional de asesinos a la que pertenecía Wick. En declaraciones a The Motion Picture Association, el director Chad Stahelski explicó que este acto de quitarse el dedo representaba «quitar la capacidad de simbolizar la unión o el amor». Lo cual está muy bien, pero para la cuarta película significaba que cada escena con John Wick tenía que presentar a un Keanu Reeves sin dedos.
Los supervisores de efectos visuales Jonathan Rothbart y Janelle Croshaw Ralla hablaron sobre el desafío que esto planteó en una entrevista con la revista en línea centrada en VFX Befores and Afters. La pareja reveló que Reeves en realidad usaría un dedo negro especial o un «condón de chef» en su dedo durante la filmación, lo que hizo que la eliminación digital fuera mucho más fácil. Rothbart agregó:
«Uno de mis trabajos en el set era, cada vez, verificar que él tuviera eso allí, porque Keanu odiaba usar esa cosa. Tratábamos de mitigar el trabajo tanto como fuera posible al tener siempre este condón negro en su dedo. Luego, esos equipos de VFX hicieron un trabajo increíble al quitar el dedo».
Es divertido pensar que en una película que exige tanto de Reeves físicamente, su mayor queja fue usar un dedo meñique cómodo.