Según Fangoria, «The Rage: Carrie 2» se inspiró en los Spur Posse de la vida real, un grupo de estudiantes de secundaria que categorizaron sus agresiones a niñas menores de edad con puntos. Si bien los matones en la adaptación de Brian De Palma de «Carrie» son ciertamente crueles y sus acciones profundamente traumatizantes (arrojarle tampones a Carrie, engañarla para que vaya al baile de graduación con Tommy y arrojarle sangre de cerdo encima), estas son bromas inmaduras. En «The Rage: Carrie 2», los matones son verdaderos depredadores que manipulan a las jóvenes para que tengan relaciones sexuales, a menudo por primera vez, y luego las descartan cruelmente.
Se jactan de cómo colman deliberadamente de afecto y promesas de una relación comprometida a estas chicas, a pesar de que las consideran nada más que una «bomba» o una «loca». Los futbolistas no tienen ningún respeto por estas mujeres y por los profundos sentimientos que a menudo albergan. Los chicos bromean diciendo que su idea del amor es sólo «quince segundos de ruidos de aplastamiento». Como resultado de su trato cruel, la mejor amiga de Rachel se arroja desde el techo de la escuela, mientras que muchos otros quedan emocionalmente devastados. Cuando Sue Snell le cuenta al entrenador de fútbol acerca de esta epidemia de chicas abatidas, él le resta importancia, insistiendo en que «no hay nada ilegal en romperle el corazón a una chica».
«The Rage: Carrie 2» tiene un alcance mayor que el «Carrie» original, y describe cómo los hombres en el poder mantienen en marcha las ruedas de la misoginia. Los futbolistas pueden fácilmente ignorar cualquier acusación de estupro porque sería demasiado «perjudicial» para su carrera deportiva. Esto trae a la mente innumerables casos reales, como el de Brock Turner, donde el éxito atlético de los jóvenes importaba más que los delitos sexuales que cometían. La escena le da a «The Rage: Carrie 2» un impacto significativo en el mundo real.