Francia nunca había respirado tan mal. Francia registró este verano las emisiones de carbono estimadas más altas de los incendios forestales desde que comenzaron los registros en 2003, anunció el viernes 12 de agosto Copernicus, el programa europeo sobre el cambio climático.
Según los últimos datos satelitales del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera (CAMS), fechados el día anterior, desde principios de año, los incendios franceses han liberado a la atmósfera más de un millón de toneladas de carbono, muy por encima de la media. (poco más de 0,5 millones de toneladas).