Celine Weiss de Oberpullendorf es una verdadera experta en todos los oficios. La futura maestra de escuela primaria de 21 años no solo es entrenadora de patinaje sobre hielo, esquí, snowboard y fitness, sino también una maestra de danza calificada. ¡Y hasta hace unos años también era miembro del consejo parroquial y acólita de monaguillos! Con el fin de atraer a tantos visitantes como fuera posible a las fiestas y servicios parroquiales, juntó sus habilidades y ensayó bailes regularmente con los jóvenes acólitos.
Ya sea vals, csardas, boogie, rock’n-roll, hip-hop o chachachá: las coreografías fueron tan bien recibidas por el público que cada vez más niños querían formar parte de ellas. «Mientras tanto, incluso hemos sido contratados para presentaciones en bailes, festivales de carpas, ferias de iglesias, bodas, fiestas de cumpleaños, eventos en hoteles y fiestas temáticas, y viajamos por todo el país», dice Weiss.
Brillo motivado
Entrenan juntos de cuatro a seis horas cada semana y, por lo general, más antes de las actuaciones. Los niños a menudo aprenden varias coreografías nuevas al mismo tiempo, por una cuota mensual de membresía de 30 euros, porque también se pueden ensayar espectáculos especiales a pedido de los organizadores. “Además de los requisitos escolares, la formación requiere mucho tiempo. Pero los niños están allí con alegría y entusiasmo y de vez en cuando se toman el tiempo para servir”.
Weiss proporcionó muchos disfraces diferentes para los jóvenes bailarines. Encarga los trajes a una empresa británica que cose ropa de danza: “La mayor parte la financio de mi propio bolsillo porque no encuentro nada más hermoso que cuando brillan los ojos de los niños. Además, un espectáculo con vestidos brillantes funciona mucho mejor”.
Si aún no conoce a los «Bailarines coloridos», puede admirarlos el 18 de febrero en el baile húngaro en el ayuntamiento de Oberpullendorf; realizarán el interludio de medianoche. El martes de carnaval actúan con su profesora de danza y sus príncipes carnavalescos en la plaza principal.