El plan de París para abrir al público 300 nuevas hectáreas de espacios verdes


De la Villa Windsor, esta mansión privada situada al borde del Bois de Boulogne, en París, siempre se habla de los ilustres inquilinos que allí se sucedieron. El general de Gaulle en la Liberación, entonces ex rey de Inglaterra Eduardo VIII, que se convirtió en duque de Windsor tras su abdicación, y su esposa. En los años 80, fue el empresario egipcio Mohamed Al-Fayed quien alquiló la residencia, donde incluso pensó en instalar a su hijo Dodi y a Lady Diana. En las fotos, esplendor, mozos de traje, perros con correa, pero desde el parque arbolado de 7.000 metros cuadrados nunca se adivina nada.

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Su apertura al público por primera vez, en mayo de 2024 (el espectáculo Jardins, Jardin, expulsado de las Tullerías por la preparación de los Juegos Olímpicos, encontró refugio allí) es, por tanto, un pequeño acontecimiento en sí mismo. Pero estos cuatro días de paseo autorizado bajo los árboles de la propiedad son sobre todo un anticipo de lo que pronto será posible hacer durante todo el año.

Este parque es uno de los lugares identificados por la alcaldesa de París para cumplir el objetivo fijado en su futuro plan urbano local (PLU): abrir al público 300 nuevas hectáreas de espacios verdes, de aquí a 2040. El umbral de los 10 metros cuadrados entonces se alcanzaría la tasa por habitante recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), tal como figura en una circular ministerial de 1973. “Los espacios verdes y arbolados son esenciales para el equilibrio físico de todos los organismos vivos”, “para el equilibrio psicológico de los hombres”, escribió el gobierno de Pierre Messmer. Con el calentamiento global, son espacios imprescindibles para las ciudades del futuro.

Un gran desafío

En París, donde el último recuento arroja 8,6 metros cuadrados por habitante (3,6 m² sin contar la madera), el desafío es inmenso. Entre 2014 y 2020, solo se crearon 30 hectáreas (de un total de 1.883) y (casi) no hay más terreno disponible. Por lo tanto, es inútil imaginar que multiplicar por diez la ecologización de la capital implicará la reconquista de tierras baldías industriales como en los años 1980 (parque André-Citroën, La Villette), o de derechos de paso ferroviarios, más recientemente (Martin- Parque Lutero -Rey).

La estrategia es completamente diferente. El depósito se encuentra en cada distrito, detrás de las puertas de las propiedades, en los lugares de estacionamiento o creando “calles jardín”, el nuevo concepto. Es este plan el que los equipos de Emmanuel Grégoire, primer diputado encargado de urbanismo de Anne Hidalgo, y Christophe Najdovski, diputado de espacios verdes, detallaron, el jueves 30 de noviembre, a los componentes de la mayoría municipal (socialistas, ecologistas y comunistas).

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