encontrar el descifrado de nuestro corresponsal en Washington


Tu comentario también lo hacen muchas personas en Estados Unidos, especialmente en los platós de televisión desde anoche. Pero me gustaría recordar un punto importante. Las diversas investigaciones en curso contra Donald Trump no están coordinadas por el Ministerio de Justicia, no están centralizadas. Cada uno sigue su horario, sus limitaciones. Cada uno conoce sus retrasos, sus obstrucciones, sus recursos o sus súbitas aceleraciones.

Hay ahora en curso otras tres investigaciones, a nivel federal o local, que constituyen amenazas al menos tan graves para Donald Trump como la del fiscal Bragg. El primero es la investigación federal sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 por parte de partidarios del expresidente. Este es un caso extenso, de una complejidad increíble, en el que ya han sido imputadas alrededor de mil personas, por diversos hechos. Está dirigida por el fiscal especial Jack Smith, quien se beneficia del importantísimo esclarecimiento realizado por la comisión de investigación de la Cámara de Representantes, que concluyó su trabajo en diciembre. A sus ojos, Donald Trump había jugado un papel central en las falsas acusaciones de fraude después de las elecciones presidenciales de 2020, luego en la presión sobre altos funcionarios y funcionarios electos locales en varios estados, para evitar la certificación de los resultados. Finalmente, animó a sus seguidores a marchar hacia el Capitolio, ignorando deliberadamente el hecho de que algunos estaban armados.

La segunda investigación la lleva a cabo en Georgia la fiscal Fani Willis. Se trata precisamente de la presión ejercida por Trump sobre los funcionarios locales de la organización de las elecciones presidenciales, en noviembre de 2020. En particular, había pedido al secretario de Estado, Brad Raffensperger, que » encontrar « 11.779 votos, el margen de su derrota en Georgia. Según la prensa estadounidense, el gran jurado tiene la intención de decidir sobre varios cargos en este caso.

La tercera investigación, también federal, se refiere a la posesión y ocultación por parte de Donald Trump de cientos de documentos clasificados, tomados de la Casa Blanca durante la transición, en enero de 2021. El FBI allanó la residencia de Trump en Mar-a-Lago, Florida, en Agosto de 2022. Allí también el expresidente había gritado persecución, cimentando su base de seguidores. Pero nunca ofreció una explicación satisfactoria por haber engañado al Archivo Nacional, que había exigido la devolución de los archivos.

Piotr Smolar (Washington, corresponsal)



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