Déjate llevar, papá, por tus pasajeros. Haz que todo el mundo haga cola para mear antes de dejarles el coche. Llene el tanque de gasolina en la última estación antes de la autopista/autopista. Empaca el auto con bocadillos.
“No, no nos detendremos en McDonalds. Come algunas galletas de mantequilla de maní”.
Gestiona el viaje como si estuvieras huyendo de la ciudad antes de que se bombardee. Es comprensible que tus pasajeros/víctimas piensen que eres un ogro. Sin embargo, nadie se quejará cuando llegue rápido a su destino y tenga más tiempo para pasar con sus seres queridos antes de tener que volver al automóvil para conducir a casa. No eras el héroe que querían, pero eras el héroe que necesitaban.
Nada de esto aplica si el viaje es una visita obligada a familiares que sabes que te van a bombardear con sus mierdas de opiniones postelectorales. En ese caso, deja los faros encendidos durante la noche y los llama por la mañana para decirles que el automóvil no arranca.
Un viaje es más sencillo si no tienes que parar treinta veces en el camino. Menos alegre, tal vez, pero más simple. ¿Qué te importa más?
Enviado por: IRegertNothing