Si bien todas las películas de «Godzilla» técnicamente se centran en sus personajes humanos en lugar de simplemente pasar 2 horas con un lagarto gigante destruyendo edificios, las grandes hacen que te preocupes por esos humanos incluso más que por el lagarto. «Godzilla Minus One» no sólo retrocede en el tiempo para aclarar aún más la alegoría nuclear del monstruo (el aliento atómico literalmente toma la forma de una nube en forma de hongo), sino para decir algo sobre el espíritu y las instituciones humanas. La película es muy clara en su mensaje contra la guerra y en cómo Japón perdió la guerra en el momento en que el gobierno y el ejército decidieron que valía la pena enviar a niños jóvenes a literalmente hacerse estallar sin ningún motivo.
Es por eso que los héroes de «Godzilla Minus One» no son miembros de una unidad militar de élite ni siquiera del ejército en general. En cambio, son individuos que vivieron los horrores de la guerra y ahora deciden luchar no por el honor, no por el rey y el país, sino los unos por los otros. Individuos que ven que vale la pena morir ayudándose unos a otros en lugar de abandonarse a sus propias desgracias. Por primera vez en años, los humanos no eran sólo los héroes de una película de «Godzilla», sino los personajes más interesantes a seguir.
En cuanto a hacia dónde podría ir la franquicia a continuación, aún no lo sabemos. Al igual que «Shin Godzilla», esta película es independiente, pero también incluye una etiqueta final que provoca el regreso de Godzilla. Dado lo mucho que el director Yamazaki se inspiró en “Godzilla, Mothra y King Ghidorah: Giant Monsters All-Out Attack”, tal vez sea posible una secuela con los titulares Mothra y King Ghidorah.