La agencia calificadora Fitch dijo el viernes que mantiene la calificación crediticia «AAA» de Estados Unidos en observación negativa, a pesar de un acuerdo bipartidista sobre el límite de la deuda para evitar un incumplimiento catastrófico.
La decisión se tomó un día después de que los senadores estadounidenses votaran a favor de suspender el límite de la deuda federal, culminando semanas de tensas negociaciones para eliminar la amenaza de un desastroso incumplimiento crediticio solo cuatro días antes de la fecha límite establecida por el Tesoro.
Forjada entre el presidente demócrata Joe Biden y los líderes republicanos, la medida fue aprobada por el Senado con una cómoda mayoría un día después de pasar por la Cámara de Representantes.
Si bien la resolución del estancamiento del techo de la deuda significa que el gobierno de EE. UU. podrá cumplir con sus obligaciones, Fitch Ratings dijo que mantiene una «Revisión negativa de calificación» en los Estados Unidos.
Esto ocurre «mientras consideramos todas las implicaciones del episodio de riesgo más reciente y las perspectivas para las trayectorias fiscales y de deuda a mediano plazo», agregó Fitch en un comunicado.
– Disminución de la confianza –
La agencia reconoció consideraciones positivas esta vez, como llegar a un acuerdo a pesar del «partidismo político acalorado» mientras se reducen modestamente los déficits fiscales durante los próximos dos años.
Pero los repetidos enfrentamientos políticos sobre el límite de la deuda y las suspensiones de última hora cuando el Tesoro está a punto de no cumplir con todas sus obligaciones «reducen la confianza en la gobernanza en asuntos fiscales y de deuda», dijo Fitch.
«De hecho, ha habido un deterioro constante en la gobernabilidad durante los últimos 15 años, con una mayor polarización política y partidismo», agregó el comunicado.
Los economistas han advertido que el país podría quedarse sin fondos para pagar sus facturas el lunes, lo que casi no deja margen para demoras en la promulgación de la Ley de Responsabilidad Fiscal.
Con su paso por el Senado, el proyecto de ley ahora se dirige al escritorio de Biden para ser firmado como ley.
El viernes, Fitch dijo que tiene la intención de resolver la vigilancia negativa en el tercer trimestre de 2023.
«La coherencia y la credibilidad de la formulación de políticas, así como las trayectorias fiscales y de deuda esperadas a mediano plazo, serán factores clave en nuestra evaluación», dijo Fitch.
El levantamiento del llamado tope de la deuda, un límite al endeudamiento del gobierno para pagar las facturas ya incurridas, es a menudo una rutina.
Pero aumentar el límite de endeudamiento, actualmente en $31,4 billones, ha sido un tema polémico durante varios años, con los republicanos del Congreso presionando para reducir el gasto y reducir el déficit presupuestario a cambio de un aumento.
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