En la «Schlagerstrandparty» de Florian Silbereisen (40), Michelle interpretó su nuevo sencillo «Scheißkerl», pero esta vez el tema principal de conversación no fue su música, sino su estilo durante la presentación. Sexy y atrevida, Michelle lució un traje de una pieza azul brillo con escote pronunciado y aberturas en las caderas. A muy pocos fanáticos de los éxitos pareció gustarles esta elección. Algunos usuarios se quejaron en Twitter y criticaron su atuendo, especialmente los cortes en las caderas que fueron objeto de críticas. Hubo comentarios como: «Cuando los recortes son realmente desfavorables», «Es un programa familiar» o «Es simplemente vergonzoso».