Al comienzo de la temporada, nuestros líderes, incluido el propio Ted, están en lo más alto, ya que fueron ascendidos nuevamente a la Premier League luego de un descenso difícil. Sin embargo, ese subidón no dura mucho, ya que las realidades de la deserción de Nate al West Ham se presentan junto con una gran cantidad de problemas personales que abarcan toda la gama entre los personajes principales. Por tener una victoria tan grande en el retrovisor, la vida realmente parece golpearlos a todos en la cara con bastante rapidez. Inicialmente, sin que ellos lo supieran, estos contratiempos menores prepararon a nuestros héroes del fútbol por los caminos que debían seguir, y no son necesariamente los viajes personales más divertidos y comprensivos.
Para el episodio 3 de la nueva temporada, estas trayectorias están claramente a la vista. Ted se verá obligado a seguir adelante con su vida romántica. El sentido de logro de Rebecca se restaurará al ganar contra Rupert y su equipo West Ham. Keeley se verá obligado a aprender lo que significa ser un jefe. Roy aprenderá el verdadero valor de la conexión platónica y romántica. ¿Y Jaime? Tendrá la oportunidad de demostrarse a sí mismo que siempre ha valido la pena.
En cuanto a Nate, su arco es especial, ya que parece haber estado trabajando desde que pasó de recogepelotas a entrenador. Va a descubrir cómo la autoestima puede provenir de un lugar de orgullo gracioso, en lugar de una venganza envidiosa. Cada viaje es su propia pequeña búsqueda noble, no necesariamente el obstáculo más grande o monumental que jamás superarán, pero aún así cada una es una lección profundamente importante para aprender. Cada arco de personaje principal de esta temporada es un trampolín crucial hacia una vida más plena y rica, y por lo general, el camino hacia ese tipo de realización no es exactamente el más fácil o el más emocionante de seguir.