«Los jóvenes entendieron que podían saquearlo todo»: en Marsella, el teniente de alcalde se alarma por los disturbios


Corentin Alloune / Crédito de la foto: LIONEL BONAVENTURE / AFP
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14:46 01 de julio de 2023

El despertar fue brutal para los habitantes de la ciudad marsellesa la mañana de este sábado. En la noche de viernes a sábado, puede ser Marsella que la situación era de lo más tensa. Los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los alborotadores duraron al menos hasta las 3 a.m., con escenas de violencia sin precedentes. La situación es tan tensa en Marsella que el Ministro del Interior ha decidido enviar allí refuerzos adicionales.

Samia Ghali, teniente de alcalde de Marsella y exsenadora de Bouches-du-Rhône, acudió esta mañana a comprobar el alcance de los daños en el centro comercial Grand Littoral. El funcionario electo no entiende por qué no se ha protegido más a la ciudad.

“Espero que estén a la altura de las circunstancias”

El teniente de alcalde se muestra impotente ante la falta de información del gobierno. Tras una cuarta noche violenta, Samia Ghali no tiene información sobre los refuerzos que llegan a Marsella. “Espero que estén a la altura porque ayer les puedo decir que estuvimos lejos de eso. Sin embargo, sabíamos cuándo iban a atacar los alborotadores, dónde y cuándo”, asegura.

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Agrega que se enviaron invitaciones a los jóvenes a través de las redes sociales para ir a ciertas tiendas. “Y lo que no entiendo es cómo no pudimos evitar la tragedia”, lamenta el elegido. Algunos lugares han sido protegidos como centros sociales, pero no sin dificultad. “Tuvimos que llamar a todos los que conocíamos en todas partes, para que cada uno, a su manera, tratara de calmar un poco a los jóvenes”, explica.

Samia Ghali recuerda a los padres la importancia de proteger a sus hijos del peligro. Ella nota en el suelo que a menudo son jóvenes de 10 a 12 años. “No tienen nada que hacer fuera de noche, solos”, testimonia el teniente de alcalde al micrófono de Europa 1. Ante esta situación, la solución no sería poner toque de queda. «Si hacemos uno, ¿teníamos que tener también a la policía para luego hacer cumplir el toque de queda. No había ni el personal para asegurar que las tiendas y los lugares no se saquearan», alarmó el elegido.

Casi tiene la sensación de ser espectadora de la noche dramática que vivió Marsella el viernes por la noche. “Los jóvenes entendieron que podían saquearlo todo. Ningún policía los iba a detener”, lamenta.



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