Virgin Galactic podría alcanzar otro hito hoy en su búsqueda para ofrecer viajes al espacio suborbital. Si el clima coopera y todo sale según lo planeado para la compañía, su primer vuelo privado de pasajeros despegará de sus instalaciones de Spaceport America a las 11 a.m. EDT. El vuelo comercial inaugural de Virgin Galactic tuvo lugar a fines de junio, pero ese llevó al espacio a trabajadores del gobierno italiano, incluidos dos miembros del personal de la Fuerza Aérea. Esta vez, sus tres pasajeros son civiles, y uno de ellos es incluso el primer cliente de pago de la compañía.
Esa distinción es para Jon Goodwin, un atleta olímpico británico que compitió en los juegos de 1972 en Munich como piragüista. De acuerdo con la BBCGoodwin pagó $ 250,000 por su boleto en 2005 y le preocupaba no poder continuar con el vuelo después de que le diagnosticaron la enfermedad de Parkinson en 2014. Los otros dos pasajeros son un tándem de madre e hija del Caribe, Keisha Schahaff y Anastatia Mayers. Schahaff ganó dos asientos en un sorteo de recaudación de fondos para la organización sin fines de lucro Space for Humanity y había elegido a su hija, estudiante de física en la Universidad de Aberdeen en el Reino Unido, para que la acompañara.
La nave espacial VSS Unity de la compañía sale del suelo unida a un avión de transporte denominado VMS Eve. A una altitud de 50,000 pies, la nave nodriza deja caer a Unity, que luego enciende su motor de cohete para continuar su viaje hacia el borde del espacio. La nave espacial apaga su motor y se desliza por el espacio antes de descender, dando a los pasajeros tres minutos para disfrutar de la ingravidez en la cabina mientras contemplan las vistas de nuestro planeta a través de las 17 ventanas de Unity. Eso es, al menos, lo que se supone que deben experimentar los pasajeros. En cuanto al resto de nosotros, podemos verlos despegar a través de la cobertura de Virgin Galactic del lanzamiento en vivo a través de su sitio web.