Escuchar la voz de su hijo herido por teléfono no fue fácil para Hilaria. Porque en ese momento supo que necesitaría al menos 20 minutos antes de poder ofrecer consuelo a su pequeña querida en el lugar. «Nadie te prepara para no poder quitarles el dolor y el miedo de inmediato», explicó en la plataforma de redes sociales.
Aunque el proceso de curación tardara un poco más, dadas las circunstancias, Rafa volvería a estar bien. ¡Uf! Después de este breve momento de conmoción, Hilaria y Alec pueden respirar de nuevo.