“No esperes un Pi 5 el próximo año. El próximo año es un año de recuperación”, dijo el CEO. “Creo que tiene mérito que pasemos un año antes de considerar la introducción de algo nuevo, que pasemos un año recuperándonos de lo que nos acaba de pasar a todos”.
“El próximo año es un año de recuperación”
Si bien ha habido problemas en la cadena de suministro en gran parte del sector tecnológico, Raspberry Pi ha sido un ejemplo particularmente destacado. Sus computadoras en miniatura, que compran tanto las empresas para alimentar sus productos como los clientes directamente, han sido excepcionalmente difíciles de comprar listas para usar durante los 18 meses gracias a los efectos colaterales de la pandemia como el escasez mundial de chips. Si bien la compañía ha seguido siendo capaz de suministrar a estos clientes comerciales, los suministros a los aficionados se han visto afectados.
El peligro, explica Upton, es que la introducción de un nuevo producto mientras la empresa aún se está recuperando corre el riesgo de que la producción del nuevo dispositivo no pueda aumentar adecuadamente para satisfacer la demanda. Incluso podría correr el riesgo de «canibalizar» el suministro de modelos existentes, al competir por recursos como la capacidad de prueba o el empaque. Eso sería “un desastre”, dice.
“Vamos a ser muy cautelosos acerca de cómo buscamos avanzar”, explica el CEO. Upton ha dicho anteriormente que espera que el suministro se recupere a los niveles previos a la pandemia para el segundo trimestre de 2023. Hablando con Explaining Computers, Upton dijo que la compañía debería poder comenzar a pensar en Pi 5 en la segunda mitad del próximo año o 2024.
Hay señales de que la situación ya está empezando a mejorar. A principios de este mes, la compañía anunció algunas mejoras en los canales de su cadena de suministro y señaló que ha podido reservar «poco mas de 100.000 unidades” para la compra de entusiastas. “Si bien aún no estamos completamente fuera de peligro, las cosas ciertamente están mejorando”, escribió Upton.
Han pasado más de tres años desde Raspberry Pi introdujo el Pi 4 en 2019, lo que ya supone un gran desfase temporal entre actualizaciones generacionales. Un retraso hasta 2024 o posterior significa que puede haber cuatro o incluso cinco años entre Pi 4 y Pi 5.