El número de muertos por un espeluznante accidente de tráfico en el oeste de Kenia aumentó a 49, dijo un ministro del gobierno el sábado, mientras los rescatistas trabajaban para limpiar los escombros donde se teme que haya más víctimas atrapadas.
En uno de los accidentes más mortíferos en Kenia durante varios años, un camión se salió de control y embistió a varios otros vehículos y personas en un cruce de carreteras concurrido el viernes por la noche, dijo la policía.
«Desafortunadamente, perdimos a 49 personas en un accidente aquí en Londiani», dijo a los periodistas el ministro de Transporte, Kipchumba Murkomen, durante una visita al lugar del desastre.
Los rescatistas reanudaron la búsqueda de las víctimas del accidente, que ocurrió en una carretera entre la ciudad de Nakuru, junto al lago, y Kericho, un área conocida por sus exuberantes plantaciones de té.
«La búsqueda se reanudó y queremos retirar dos de los cuerpos entre los escombros, no sabemos si son más», dijo el comisionado regional del Valle del Rift, Abdi Hassan.
Dijo que más de 30 personas también resultaron heridas cuando el camión golpeó autos, minibuses, boda bodas (mototaxis) y puestos de mercado en el concurrido cruce de Londiani.
Las autoridades habían dado un número de muertos de 48 a última hora del viernes.
El destino del conductor del camión no quedó claro de inmediato.
Los líderes de Kenia, incluido el presidente William Ruto, expresaron sus condolencias después del accidente y Londiani fue tendencia en las redes sociales, con muchas personas publicando imágenes de una vela junto a la palabra Londiani en Twitter.
«El accidente ocurrió en un instante, muchos de ellos no tuvieron tiempo de escapar», dijo un testigo, Joel Rotich.
«Había mucha confusión porque la gente gritaba por todas partes y todos corrían tras el accidente».
Según cifras de la Autoridad Nacional de Transporte y Seguridad de Kenia, al menos 21.760 personas se vieron involucradas en accidentes de tránsito el año pasado, incluidas 4.690 que fallecieron.
En un discurso en diciembre, Murkomen culpó al error humano por gran parte de la carnicería en las carreteras, incluida la conducción temeraria o en estado de ebriedad, el exceso de velocidad y los adelantamientos peligrosos.
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