Foto: Leonardo Muñoz/VIEWpress/Corbis vía Getty Images
En diciembre, la Organización Trump fue declarada culpable de fraude fiscal y otros 16 delitos. El viernes, la compañía fue multada con un gran total de… $1.6 millones. En una victoria para los fiscales, el juez de la Corte Suprema del Estado en el caso dictó la cantidad máxima permitida según la ley de Nueva York. Pero no es exactamente un escenario de pesadilla para la empresa multimillonaria, ni para el propio Donald Trump.
“Esta condena fue consecuente”, dijo el fiscal de distrito Alvin Bragg, “la primera vez en la historia de una condena penal de las empresas del expresidente Trump”. Pero agregó: “Quiero ser muy claro: no creemos que eso sea suficiente. Nuestras leyes en este estado deben cambiar para capturar este tipo de fraude sistémico y atroz de más de una década”.
El juicio, que concluyó el mes pasado, se centró en la práctica de la compañía de otorgar beneficios fiscales extraoficiales a los ejecutivos y luego falsificar los registros para cubrir sus huellas. En el centro del ardid estaba el ex director financiero de la Organización Trump, Allen Weisselberg, quien se declaró culpable de 15 cargos de fraude fiscal el verano pasado y cooperó con los fiscales en su caso contra la empresa a cambio de un castigo más leve. Weisselberg fue sentenciado a cinco meses en Rikers Island a principios de esta semana.
Aunque fue invocado muchas veces durante el juicio, Trump no enfrentó ningún cargo personal relacionado con el esquema de la compañía. Pero todavía está luchando contra varias investigaciones, que van desde su papel en la violencia del 6 de enero hasta la fuga de documentos clasificados, que podrían causar mucho más daño. Bragg también está investigando si Trump infló a sabiendas los valores de sus propiedades, además de investigar sus supuestos pagos de dinero secreto a Stormy Daniels.
Ver todo