Cuatro jóvenes, de entre 18 y 20 años, fueron procesados y encarcelados por asesinato en una banda organizada, casi seis meses después de la muerte de Lucas, de 17 años, golpeado a finales de julio en Fleury-Mérogis (Essonne), informó el sábado la fiscalía de Evry. Oficina contactada por AFP. Esto eleva a dieciséis el número de personas procesadas en esta investigación.
Golpeado en la calle
Estos cuatro sospechosos, así como otros cinco jóvenes ya presentados ante un juez de instrucción el miércoles y el jueves, habían sido arrestados a principios de semana durante una ola de arrestos de diez personas en Evry, Draveil y Les Lisses. Uno de ellos fue puesto en libertad al final de su custodia policial, dijo la fiscalía. Los cuatro sospechosos presentados el viernes por la noche a un juez de instrucción fueron puestos bajo custodia.
Estos jóvenes están implicados en el asesinato de Lucas, un adolescente residente en el pequeño pueblo de Fleury-Mérogis, 25 km al sur de París. El adolescente había sido golpeado en plena calle el 26 de julio antes de morir al día siguiente. Su muerte se había producido tras una reyerta entre bandas de Evry y Fleury.
La víctima no participó en la pelea.
Según el tío de Lucas, que luego declaró a la AFP, su sobrino no estaba involucrado en estos enfrentamientos, sino que «acababa de salir de su casa para ir a la casa de un amigo» cuando fue atacado violentamente. Una versión apoyada por el alcalde (PCF) Olivier Corzani, que describe a un adolescente «tranquilo y gentil», que se encontró «en el momento equivocado en el lugar equivocado». Estas nuevas imputaciones se suman a otras siete, ocurridas el 11 y 12 de agosto, tras la apertura de una investigación judicial. Siete jóvenes, de entre 18 y 20 años, habían sido encarcelados por asesinato en una banda organizada.
Essonne, al sur de París, es escenario habitual de enfrentamientos a veces muy violentos entre jóvenes de barrios o ciudades rivales, pero rara vez mortales. El origen de las rivalidades a menudo sigue siendo nebuloso. En 2020, según cifras del Ministerio del Interior, una cuarta parte de las reyertas registradas en Francia tuvieron lugar en este departamento de alrededor de 1,3 millones de habitantes.