El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, ha cancelado su participación en el Foro Económico Mundial de Davos debido a la aguda crisis energética que atraviesa su país, según anunció su portavoz el domingo 15 de enero. Sudáfrica está experimentando apagones récord y los problemas en la empresa estatal Eskom, que produce más del 90% de la electricidad del país, empeoraron aún más durante el último año.
Ramaphosa debía encabezar una delegación del gobierno al centro turístico de los Alpes suizos esta semana, pero permanecerá en su país para reunirse con Eskom y líderes políticos, dijo el portavoz presidencial Vincent Magwenya. “El Presidente convoca a una reunión con los líderes de los partidos políticos representados en el Parlamento, el Neccom [National Energy Crisis Committee] y la Junta Directiva de Eskom”escribió el Sr. Magwenya en Twitter.
La desconexión de carga ha ido en aumento en Sudáfrica durante años, ya que Eskom no logra seguir el ritmo de la demanda ni mantener su infraestructura obsoleta, en su mayoría centrales eléctricas de carbón. Pero las averías han alcanzado nuevos récords en los últimos doce meses, defendiéndose la empresa cuestionando el sabotaje. Esta semana, debido a una nueva avería en sus instalaciones, incluso anunció cortes de carga que podrían durar hasta casi doce horas diarias, hasta nuevo aviso.
Estos recortes, que ya le han costado al país cientos de millones de dólares al interrumpir el comercio y la industria, están exacerbando el descontento público. Sobre todo porque Eskom aumentará sus precios un 18,65% a partir de abril. En este contexto, el principal partido de la oposición, la Alianza Democrática (DA), llamó el sábado a los sudafricanos a sumarse a un «gran marcha de protesta»el 25 de enero en Johannesburgo, para «para expresar su ira» frente a esta situación.