Queridos tiburones, Steven Spielberg lamenta lo que les hizo ‘Tiburón’


Tiburones, Steven Spielberg lo siente. El director del éxito de taquilla de verano de 1975, Tiburón, dijo que se siente responsable del impacto mortal que la película pudo haber tenido en las poblaciones de tiburones.

Spielberg, que tenía solo 27 años cuando hizo Tiburón, dijo que teme que «los tiburones estén de alguna manera enojados conmigo por el frenesí de alimentación de los pescadores deportivos locos que sucedió después de 1975, algo que realmente, y hasta el día de hoy, lamento… la destrucción de la población de tiburones debido al libro (Peter Benchley) y la película, realmente lo lamento», dijo el director en una entrevista de Desert Island Discs con BBC Radio publicada el domingo.

Parece que algo le dio un mordisco gigantesco a la población de tiburones desde la década de 1970 hasta la actualidad. Según un estudio de 2021 publicado en la revista Nature, la población mundial de tiburones y rayas se redujo en más del 71 % entre 1970 y 2018. (Aunque Gavin Naylor, director del Programa de Florida para la Investigación de Tiburones, le dijo a The Washington Post que cree que las personas habría pescado tiburones sin la película).

Si bien Spielberg puede sentirse mal por la influencia que tuvo su película, en realidad no mostró mucho al tiburón en la famosa película. Para ello se fabricaron tres tiburones mecánicos, pero no eran fiables y la espuma de la que estaban hechos absorbía el agua y los hinchaba. Por esa razón, el director optó por no mostrar mucho al tiburón, lo que generó suspenso y mejoró la película, dice.

«Es una película mucho mejor que el tiburón no dejaba de descomponerse, porque tuve que ser ingenioso para descubrir cómo crear suspenso y terror sin ver al tiburón en sí», dijo Spielberg en la entrevista. Señaló que el afamado director Alfred Hitchcock siguió una filosofía similar en sus películas, encontrando formas de asustar a la audiencia «sin realmente ver nada».

«Fue una buena fortuna para mí que el tiburón siguiera rompiéndose», dijo Spielberg. «Fue mi buena suerte y creo que también fue la buena suerte del público… es una película más aterradora sin ver demasiado al tiburón».



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