Tres grupos de ayuda extranjera, incluido Save the Children, anunciaron el domingo que suspendían sus operaciones en Afganistán después de que los talibanes ordenaran a todas las ONG que impidieran que su personal femenino trabajara.
El anuncio se produjo cuando altos funcionarios de las Naciones Unidas y docenas de ONG que operan en Afganistán se reunieron en Kabul para discutir el camino a seguir después de que la última restricción de los talibanes asestara un duro golpe al trabajo humanitario en todo el país.
«No podemos llegar efectivamente a niños, mujeres y hombres que lo necesitan desesperadamente en Afganistán sin nuestro personal femenino», dijeron Save the Children, el Consejo Noruego para los Refugiados y CARE en una declaración conjunta.
«Mientras obtenemos claridad sobre este anuncio, estamos suspendiendo nuestros programas, exigiendo que hombres y mujeres puedan continuar igualmente nuestra asistencia para salvar vidas en Afganistán».
La orden del sábado emitida por las autoridades talibanes provocó una rápida condena internacional, y gobiernos y organizaciones advirtieron sobre el impacto en los servicios humanitarios en un país donde millones dependen de la ayuda.
La última restricción se produce menos de una semana después de que los islamistas de línea dura prohibieran a las mujeres asistir a las universidades, lo que provocó indignación mundial y protestas en algunas ciudades afganas.
(AFP)
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