Si no se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, las especies que viven en los océanos podrían ser diezmadas para 2300, advierte un estudio publicado el jueves 28 de abril en la revista Ciencia. Pero limitar el calentamiento global a 2 °C en comparación con la era preindustrial evitaría este escenario catastrófico, señalan los investigadores.
Este último utilizó modelos que analizan el vínculo entre el calentamiento global, la disminución resultante en las cantidades de oxígeno en el agua y las cantidades de dioxígeno (O2) necesarios para la supervivencia de la especie. Particularmente complicadas de estudiar, tales proyecciones de los riesgos de extinción en los océanos habían sido hasta ahora muy poco formuladas.
Pero los resultados son alarmantes: si las emisiones de gases de efecto invernadero que calientan el planeta continúan aumentando, entonces los océanos podrían experimentar una extinción masiva comparable a la del Pérmico. Durante este evento catastrófico, la biodiversidad marina se redujo a su mínimo, bajo el efecto combinado del aumento de las temperaturas y la disminución del oxígeno en los océanos, un escenario que también se desarrolla hoy.
Una fuente de esperanza
Bajo este escenario, los océanos tropicales perderían la mayoría de las especies, pero muchas especies de estas áreas migrarían a otras regiones para sobrevivir. Las especies polares, desaparecerían masivamente, al no tener lugar donde refugiarse.
Fuente de esperanza, un escenario que limitara el calentamiento global a 2°C permitiría “reducir la severidad de las extinciones en un 70%, evitando una extinción masiva”según el estudio.
El Acuerdo de París, texto de referencia internacional, fija el objetivo de contener el calentamiento global “significativamente por debajo de 2°C en comparación con los niveles preindustriales”, y si es posible a + 1,5°C. Este objetivo es » fuera de alcance « con los compromisos internacionales vigentes, según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU.
“Debido a que las extinciones marinas no han progresado tanto como las terrestres, nuestra sociedad está a tiempo de cambiar el rumbo a favor de la vida en los océanos”sin embargo, escribieron los científicos en un artículo de comentario que acompaña al estudio. “Dónde se encuentra exactamente nuestro futuro entre el mejor y el peor de los casos será determinado por las decisiones que tome la sociedad”agregaron.