Taylor Swift está lista para hacer historia en la taquilla con su película de concierto Eras Tour


Para estar entre los diez primeros a nivel mundial, la película necesitaría recaudar más de 476 millones de dólares para superar a «Ant-Man and the Wasp: Quantumania». Eso parece estar a nuestro alcance. Simplemente no se puede subestimar lo notable que esto se está perfilando. En la era de la pandemia, los estrenos de 100 millones de dólares o más son tan raros como las ballenas blancas e incluso muchas películas de superhéroes no logran alcanzar esa marca (o acercarse a ella), a pesar de ser apuestas seguras desde hace más de una década.

El hecho de que una película de concierto esté a punto de tener quizás el segundo estreno más importante del año es francamente difícil de entender. Sí, Taylor Swift es una fuerza a tener en cuenta, ya que se estima que sus conciertos del Eras Tour recaudarán 2.200 millones de dólares sólo por la venta de entradas. Pero ella no es la primera megaestrella que estrena una película de concierto en los cines.

Michael Jackson actualmente ostenta el récord mundial de taquilla con «This is It» de 2009, que recaudó 261 millones de dólares. A nivel nacional, el poseedor del récord es «Justin Bieber: Never Say Never», que recaudó un total de 73 millones de dólares en Norteamérica y superó los 99 millones de dólares en todo el mundo. Swift fácilmente eclipsará ese número en un solo fin de semana. «The Eras Tour» ya rompió el récord de ventas en un solo día para AMC, superando a «Spider-Man: No Way Home», una película que, vale la pena mencionar, llegó a ganar 1.900 millones de dólares en todo el mundo. También es importante señalar que la película se está lanzando a nivel mundial, lo que significa que su número nacional es solo la punta del iceberg.

La película del concierto de Swift estableció un récord de preventa para Cinemark. Ciertamente no está de más que los cines cobren un precio de entrada premium de $19,89, que es un precio en honor al exitoso álbum de Swift «1989». Los fanáticos, al parecer, están felices de pagar ese precio. Es muchísimo más barato que una entrada real para un concierto.



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