Un fin de semana de estreno de 100 millones de dólares, o incluso sustancialmente menos, sería fácilmente el mayor debut de una película de concierto, superando al actual poseedor del récord «Hannah Montana and Miley Cyrus: Best of Both Worlds Concert» (31,1 millones de dólares). Sin embargo, a pesar de lo inteligente que fue este lanzamiento, tengo que restar algunos puntos por las imprudentes entradas sorpresa de último minuto para las vistas previas del jueves por la noche.
Swift anunció las proyecciones de acceso anticipado con sólo un día de antelación, citando una «demanda sin precedentes». Dado que la mayoría de los Swifties, en ese momento, ya habían comprado boletos no reembolsables para otras funciones, las vistas previas del jueves fueron un asunto bastante tranquilo y comenzaron el fin de semana con más un gemido que una explosión. Las proyecciones de los jueves por la noche son estándar para la mayoría de los estrenos importantes, y si esas entradas se hubieran abierto antes, no hay duda de que «The Eras Tour» tendría una recaudación significativamente mayor durante el fin de semana de apertura. También podría haber superado fácilmente el récord del día inaugural de octubre; «Joker» recaudó 13,3 millones de dólares en los avances del jueves (alrededor de un tercio de su recaudación del día de apertura) en comparación con los 2,8 millones de dólares de «The Eras Tour» (sólo el 7% del total de 39 millones de dólares del viernes).
Según IndieWire, el anuncio de última hora también causó dolores de cabeza a los expositores:
IndieWire habló con múltiples fuentes en distribución y exhibición que respondieron a la programación caprichosa con enojo, molestia e incluso algo de disgusto. Significaba que ni AMC ni Swift eran sensibles al esfuerzo que necesitaban 3.850 salas para conseguir personal y seguridad de última hora para dar cabida a la potencial demanda masiva. […] Los competidores de la exhibición están enojados porque una vez más AMC tuvo conocimiento avanzado que le permitió preparar horarios de espectáculos revisados y ajustar los sitios de venta de entradas en línea.
Sí, Taylor Swift es una pesadilla vestida como un sueño. Pero bueno, no digas que ella no te lo advirtió.