Twisted Tower toma BioShock y lo convierte en un programa de juegos mortal dirigido por un fabricante de juguetes perturbado


La fábrica de chocolate de Willy Wonka ya es un asunto bastante siniestro, pero Twisted Tower, revelada en la exhibición Realms Deep de este año, está decidida a tomar ese concepto y mejorarlo algunos niveles más. Es un juego que busca combinar una generosa porción del ambiente art déco de BioShock de la década de 1920 con la espeluznante novela de Roald Dahl, intercambiando dulces por juguetes y un programa de juegos inquietantemente mortal.

Ahora bien, no entiendo por qué alguien en su sano juicio querría entrar voluntariamente a un lugar llamado Twisted Tower, pero el protagonista Tiny parece estar preparado para el desafío. Después de sentirse devastado porque la persona que le gusta se comprometió con su matón de la escuela, logró convencerse de que asegurarse un lugar en el juego del fabricante de juguetes Mr. Twister y ganar el gran premio de $10,000,000 de alguna manera cambiará el rumbo romántico a su favor.



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