Blizzard tiene personas que se aseguran de que las franjas de la tradición en World of Warcraft, Diablo y más se tengan en cuenta cuando se escriben nuevas historias. Sin embargo, uno de ellos tuvo la poco envidiable tarea de transcribir a mano todas las palabras dichas en los dos primeros juegos de Diablo, incluida la expansión Lord of Destruction.
En declaraciones a PCGamer en el último número de su revista (ya a la venta (se abre en una pestaña nueva)), Sean Copeland, gerente sénior de conocimiento de Blizzard, explica que, antes de 2005, el desarrollador realmente no controlaba la historia interna de sus juegos. Como tal, no había mucha documentación sobre el mundo que pintaron los dos primeros juegos de Diablo, lo que llevó a una tarea de recuperación brutal.
Si bien Blizzard claramente hace todo lo posible en estos días para mantener la historia registrada, la extraña reconfiguración no está descartada. Diablo 1 fluye hacia su secuela de manera bastante clara: derribar a la bestia titular en Diablo 1 lleva al héroe que juegas a corromperse en Diablo 2, convirtiéndolo en el villano. El tercer juego, sin embargo, hace algunos cambios, ya que el mismo héroe se convierte en el príncipe Aidan, que es el hijo mayor de un rey que Diablo atrapó para iniciar los eventos del juego original.
«Lo que he encontrado cuando se trata de sesiones creativas es la palabra no, o ser ‘policía de la tradición’, por así decirlo, por lo general no ayuda al proceso creativo», dice Copeland. «Queremos asegurarnos de dar [writers] las sugerencias para hacer que su historia funcione, porque al final del día, todos estamos tratando de contar historias geniales».
Si te apetece leer sobre la historia de Diablo en su totalidad, puedes ver el último número de PCGamer.
Recientemente, uno Diablo 4 el desarrollador explicó cómo dibujan la línea en las compilaciones siendo demasiado dominado.