Después de que Azerbaiyán conquistara la región poblada por una mayoría de armenios, Armenia exigió que los empleados de la ONU monitorearan la situación de los derechos humanos y la seguridad en el lugar en el futuro.
Ararat Mirzoian, ministro de Asuntos Exteriores de Armenia, pide una misión de la ONU a Nagorno-Karabaj.
(dpa)
Después de la conquista por parte de Azerbaiyán de Nagorno Karabaj, habitada principalmente por armenios, el Ministro de Asuntos Exteriores armenio acusó a la comunidad internacional de inacción. En el debate general de las Naciones Unidas en Nueva York el sábado, Ararat Mirsoian pidió una misión de la ONU para monitorear la situación de seguridad en el lugar.
Los «acontecimientos verdaderamente devastadores» en la región han demostrado que los problemas «no pueden resolverse únicamente con declaraciones y llamamientos generales», afirmó Mirsoian. Se debe enviar inmediatamente una misión de la ONU a Nagorno-Karabaj para monitorear la situación de derechos humanos, humanitaria y de seguridad.
Nagorni Karabaj está situada en territorio azerbaiyano, pero está habitada predominantemente por armenios y ha sido disputada durante mucho tiempo entre las dos ex repúblicas soviéticas. El martes pasado, Azerbaiyán, gobernado autoritariamente, lanzó una operación militar para conquistar la región. Un día después, los derrotados armenios de Karabaj se rindieron.
Muchos armenios acusan a su tradicional potencia protectora, Rusia, que también ha apostado sus propios soldados en el lugar, de haberlos abandonado. Según fuentes armenias, más de 200 personas murieron durante los breves combates y más de 400 resultaron heridas. Decenas de miles de civiles armenios en la región temen ahora ser desplazados u oprimidos por los nuevos gobernantes azerbaiyanos.