Antes de las elecciones, el populista libertario Javier Milei era considerado el favorito. Ahora se espera que Massa y Milei compitan entre sí en una segunda vuelta el 19 de noviembre.
Los votantes argentinos probablemente tendrán que volver a votar: según los resultados disponibles, en las elecciones presidenciales habrá una segunda vuelta entre el candidato gubernamental de izquierda Sergio Massa y el populista libertario Javier Milei.
(dpa)
El candidato del gobierno Sergio Massa sorprendentemente ganó la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina. El ministro de Economía de la izquierdista Unión por la Patria obtuvo alrededor del 36 por ciento de los votos, según anunció la oficina electoral el domingo por la noche (hora local) después de contar casi todos los votos. En segundo lugar, con un 30 por ciento, quedó el populista libertario Javier Milei del partido La Libertad Avanza, considerado el favorito.
La ex ministra del Interior Patricia Bullrich, de la alianza opositora conservadora Juntos por el Cambio, sólo logró poco menos del 24 por ciento. Por lo tanto, es probable que Massa y Milei compitan entre sí en una segunda vuelta electoral el 19 de noviembre. El futuro presidente asumirá su cargo el 10 de diciembre.
“Argentina necesita estabilidad y previsibilidad”, escribió Massa tras emitir su voto en la plataforma X, ex Twitter. Milei dijo: «Somos capaces de formar el mejor gobierno de la historia».
La segunda economía más grande de América del Sur se encuentra en una profunda crisis económica: la tasa de inflación es del 138 por ciento y alrededor del 40 por ciento de la población del otrora rico país vive por debajo del umbral de pobreza. Argentina sufre de un aparato estatal inflado, baja productividad industrial y una gran economía sumergida que priva al estado de muchos ingresos fiscales. La moneda nacional, el peso, sigue perdiendo valor frente al dólar estadounidense y la montaña de deuda crece constantemente.
Tras su victoria en las primarias, Milei era considerado el favorito en la primera vuelta de votación. El autoproclamado “anarcocapitalista” quiere introducir el dólar estadounidense como moneda de curso legal, abolir el banco central y muchos ministerios y recortar radicalmente el gasto social. Esto es especialmente bien recibido por los jóvenes, que a menudo sólo conocen la vida en constante crisis.
Massa, por otra parte, se basó en la maquinaria de campaña bien ensayada de los peronistas gobernantes y recientemente recurrió a las arcas estatales para mantener contentos a los votantes. Ordenó nuevas contrataciones masivas en el sector público, aprobó mayores desgravaciones del impuesto sobre la renta y otorgó pagos únicos para empleados y pensionados.
A pesar de la victoria de Massa en la primera vuelta, la carrera en la segunda vuelta vuelve a estar completamente abierta. Al menos una parte del electorado conservador y liberal del candidato perdedor Bullrich podría desertar y pasarse a Milei en la segunda vuelta.