Aunque hay menos dinero disponible del previsto para el período 2025-2028, Suiza debería seguir estando a la cabeza del mundo. Las universidades están protestando.
Los temores de la junta directiva de ETH se confirman: el Consejo Federal destina menos dinero del previsto.
Cada cuatro años, el Consejo Federal fija sus prioridades en materia de política de educación, investigación e innovación. Los gastos han aumentado constantemente en los últimos años, lo que también tiene que ver con el creciente número de estudiantes en las universidades. Pero ahora el gobierno está pisando el freno. Dado que el presupuesto financiero del gobierno federal está en problemas, también quiere recortar en educación e investigación.
Durante la consulta se habló de un crecimiento nominal de los costes del dos por ciento. Según las estimaciones del Consejo Federal, dada la inflación, esto habría correspondido a un crecimiento real del uno por ciento. Pero ahora el Consejo Federal quiere limitar el crecimiento a un 1,6 por ciento nominal. En total, entre 2025 y 2028 debería destinarse un máximo de 29.200 millones de francos a la educación, la investigación y la innovación, es decir, 500 millones menos de lo previsto inicialmente, pero todavía nominalmente 1.300 millones más que en los años 2021-2024. Sin embargo, si se tiene en cuenta la inflación, ya casi no se puede hablar de crecimiento.
El consejero federal Guy Parmelin subrayó que el objetivo sigue siendo mantener a Suiza a la vanguardia en los ámbitos de la educación, la investigación y la innovación. El nivel lleva años aumentando y Suiza es uno de los países más innovadores del mundo. El número de diplomas es elevado, la investigación es muy competitiva y también somos un socio solicitado para colaboraciones de investigación internacionales. Sin embargo, la palabra “prioridades” apareció con mucha frecuencia en sus comentarios. El Consejo Federal tuvo que tomar “decisiones difíciles” y ya no pudo reaccionar como antes ante el crecimiento del número de estudiantes.
El dominio ETH es la partida más grande del presupuesto federal de educación. La decisión del Consejo Federal tiene, en consecuencia, un fuerte impacto en las dos universidades de élite de Zurich y Lausana. La junta directiva de la ETH y los cantones, como principales patrocinadores de las universidades, habían advertido de antemano sobre recortes e incluso pidieron un aumento del gasto del 2,5 por ciento.
ETH se queja de que ya no se pueden implementar proyectos de infraestructura de investigación e iniciativas estratégicas de importancia nacional. Los cantones temen que el gobierno federal ya no cumpla con sus obligaciones financieras legalmente exigidas, lo que, sin embargo, el consejero federal Parmelin niega.
Al menos en lo que respecta a la financiación de la investigación, el Consejo Federal se ha adaptado un poco a las críticas. La Fundación Nacional Suiza para la Ciencia prevé un crecimiento de costes superior a la media del 2,5 por ciento y la Agencia Innosuisse para la Promoción de la Innovación prevé un crecimiento de costes superior a la media del 3,3 por ciento. Por el contrario, el sector ETH y las universidades tendrán que contentarse con un aumento nominal del 1,2 por ciento, a menos que el Parlamento corrija los planes del Consejo Federal.
Un punto de discordia entre la junta directiva de la ETH y la Secretaría de Estado de Educación, Investigación e Innovación es la cuestión de hasta qué punto pueden depender la ETH y la EPFL de sus propias reservas para financiar la investigación y la enseñanza. El gobierno federal ha estimado reservas de 1.600 millones de francos para toda la zona ETH. El presidente del Consejo de la ETH, Michael Hengartner, lo contradijo. Este dinero no está disponible, se necesita para la enseñanza y la investigación, así como para proyectos de construcción urgentes. Parmelin dijo que estaban hablando y tratando de aclarar este malentendido.