Cuando Din Djarin desciende como un cohete hacia las minas, casi esperas que se tope con un Balrog o un troll de las cavernas. Al igual que Gimli en «El Señor de los Anillos», incluso encuentra una reliquia de su antigua civilización en forma de un casco mandaloriano medio enterrado. Cuando Din comete el error de recoger dicho casco, inmediatamente es agarrado por un alienígena cyborg arácnido, que surge de la tierra.
Por un lado, podrías ver a esta criatura como una imitación de la araña gigante de «El Señor de los Anillos», Shelob. Por otro lado, su naturaleza mecánica está más en línea con el tanque araña de «Ghost in the Shell» o la infame «tarántula de 80 pies» de «Wild Wild West».
Es cuando se abre y algo más sale de la parte superior que el monstruo cyborg se vuelve verdaderamente espeluznante. Cuando Grogu se asoma por la esquina, es como si nuestro propio niño interior estuviera viendo cómo su peor pesadilla cobra vida. El monstruo tiene este ojo biomecánico, que es como un cruce entre HAL-9000 y el monstruo compactador de basura de «Star Wars: A New Hope». Su cuerpo esquelético, sin embargo, recuerda más al General Grievous, visto por última vez haciendo girar cuatro sables de luz a la vez en «La venganza de los Sith».
Cuando Bo-Katan (Katee Sackhoff) llega al rescate, solo el sable oscuro puede derrotar al monstruo cyborg. Incluso entonces, sin embargo, vuelve a la vida, su cabeza se aparta como la criatura en «The Thing» de John Carpenter. Nunca sabemos cómo llegó a ser o qué quiere, pero no puede ser nada bueno, y en la historia reciente de «Star Wars», sería difícil encontrar una criatura desagradable más memorable.
Los nuevos episodios de «The Mandalorian» se transmiten los miércoles en Disney+.