Los diseños circulares tienen sentido en el espacio. Debido a que básicamente no puedes abandonar la nave, tener un diseño en el que todo se conecte con todo lo demás es una solución natural para maximizar la eficiencia flotando por el cosmos. Hablando con Nerds & Beyond, la diseñadora de producción Beth Mickle, quien comenzó a trabajar con James Gunn en «The Suicide Squad», detalla cómo los círculos determinaron casi todo sobre el diseño de Bowie:
«Si miras la forma del Bowie, realmente puedes ver que es muy circular. Detrás de toda la cubierta del piloto es circular. Eso realmente informó los espacios interiores. La bahía médica donde pasamos la mayor parte del tiempo con Rocket, eso es un gran espacio circular, el núcleo central es un gran espacio circular, la escalera de caracol… que realmente impulsó muchos de los diseños de interiores. Luego obtienes la bonita e icónica toma mirando hacia los largos pasillos, que son todos grandes y circulares en naturaleza. Realmente tomamos el tema circular y seguimos con él».
Sin embargo, estas no fueron razones puramente estéticas. Un set solo puede ser genial si está diseñado en conjunto con la forma en que los cineastas quieren filmar el proyecto. Gunn quería un decorado que fluyera libremente, y al armarlo, Mickle «quería asegurarse de que todos los espacios estuvieran realmente conectados para que todos los actores pudieran ir de un espacio a otro en escenas de diálogo con largas caminatas, tomas de seguimiento, siguiendo actores… lo mismo con algunas de las grandes escenas de lucha y escenas coreografiadas en el barco».
Ser capaz de moverse sin problemas de un espacio a otro hace mucho para transmitir que lo que estás viendo es real, porque lo es. Hay una vida creíble que vivir en esta nave espacial falsa, y eso es algo que muy pocos diseños pueden capturar. El Bowie lo hace.