En 2022, un informe examinó cuán susceptibles son las casas del Reino Unido al sobrecalentamiento. Encargado por el Comité de Cambio Climático (CCC), un organismo público que asesora al gobierno del Reino Unido, el informe encontró que el 55 por ciento de los hogares del Reino Unido ya tienen habitaciones que se sobrecalientan cuando hace calor. En un mundo calentado por 2 grados centígrados, el modelo proyectó que todos los hogares fuera de Escocia tendrían dormitorios inaceptablemente cálidos, y el 17 por ciento de los hogares, principalmente en Londres, tendrían salas de estar y dormitorios demasiado cálidos. Si el mundo se calentara 4 grados centígrados, cada hogar cumpliría con los criterios de sobrecalentamiento. Con las políticas y acciones actuales, el planeta se dirige actualmente hacia alrededor de 2,7 grados centígrados de calentamiento.
“Los edificios y casas con mayor riesgo tienden a ser más pequeños”, dice Michael Edwards, director de la firma de arquitectura Arup, que escribió el informe de CCC. Detener el sobrecalentamiento en todos los hogares del Reino Unido en el clima actual costaría £ 250 mil millones ($ 319 mil millones) en mejoras de edificios, aunque Edwards señala que una forma eficiente de distribuir el costo sería mejorar los edificios mientras se realizan otros cambios.
Es un total considerable, pero las intervenciones contra el calor necesarias son sorprendentemente modestas. Sería un buen comienzo equipar las casas con persianas y ventanas externas que bloqueen la luz solar intensa. “La idea es detener la radiación, en lugar de lidiar con ella una vez que entra”, dice Mavrogianni. Las contraventanas exteriores son comunes en países mediterráneos como España, Italia y Grecia, que están acostumbrados a lidiar con veranos intensos. Las persianas son incluso más efectivas cuando se combinan con ventanas que se pueden abrir por completo, que es otra cosa que a menudo falta en las casas de Londres. Equipar las residencias con persianas, ventanas que bloqueen la luz, aislamiento del techo y ventiladores de techo eliminaría el sobrecalentamiento en todas partes, excepto en Londres, que todavía tendría algo de sobrecalentamiento, según el informe de Arup.
El aire acondicionado podría ayudar, pero solo como último recurso. Solo alrededor del 5 por ciento de las casas del Reino Unido tienen aire acondicionado, e incluso los hogares mediterráneos tienen muchas menos probabilidades de tener aire acondicionado que el hogar promedio de los EE. UU. En el modelo de Arup, se necesitarían acondicionadores de aire en el 22 por ciento de los hogares para hacer frente al sobrecalentamiento en el escenario de 2 grados de calentamiento. Esto viene con desventajas. Los aires acondicionados consumen mucha energía y son vulnerables a los cortes de energía, lo que agrava los problemas en el peor de los casos si fallan las redes eléctricas. “Es importante que prioricemos las estrategias de enfriamiento pasivo”, dice Mavrogianni.
Las normas de construcción también se están poniendo al día con el riesgo de sobrecalentamiento. En 2021, el gobierno del Reino Unido actualizó las pautas para viviendas nuevas en Inglaterra. La actualización establece que los edificios deben construirse de manera que minimicen el exceso de luz solar no deseada en el verano y permitan formas fáciles de eliminar el calor. También establece límites máximos para el tamaño de las ventanas como proporción del espacio del piso. Los apartamentos pequeños, en esencia, deben tener ventanas más pequeñas, a menos que haya una ventilación particularmente buena.
La modernización de edificios no es la única forma de lidiar con el calor. Podemos hacer que los espacios urbanos sean más frescos plantando más árboles, creando espacios verdes y construyendo estructuras de sombra. Londres tiene un mapa de espacios frescos que señala lugares de la ciudad con temperaturas por debajo del promedio, así como fuentes de agua y espacios frescos interiores donde las personas pueden refugiarse del calor. Mavrogianni señala que mucho del conocimiento sobre el manejo de altas temperaturas está fuertemente vinculado a la cultura.