La primera ministra, Elisabeth Borne, volvió a activar el artículo 49.3 de la Constitución en la Asamblea Nacional, esta vez para obtener la aprobación definitiva sin votación del proyecto de presupuesto de la Seguridad Social. Esta vigésima apelación a este artículo de la Constitución motivó el anuncio de una nueva moción de censura por parte del grupo La France insoumise, que, como las anteriores, debería ser rechazada. Esto constituirá la adopción definitiva del proyecto de ley de financiación de la Seguridad Social (PLFSS) para 2024.
Por la mañana, el Senado, de mayoría opositora de derecha, rechazó en relectura el proyecto de presupuesto de la Seguridad Social mediante una moción de rechazo previa aprobada por 286 votos contra 38. “Otra vez repetir”lamentó la relatora general, Elisabeth Doineau, del grupo centrista: el camino parlamentario fue idéntico al de 2022 en este texto presupuestario, ya que el gobierno tuvo que asumir responsabilidades en la Asamblea para evitar el riesgo de una votación desfavorable.
El texto final conserva algunas medidas de los senadores
El déficit de la Seguridad Social, estimado ahora en 8.700 millones en 2023, alcanzaría los 10.500 millones en todas las ramas en 2024, frente a los 11.200 millones previstos en el texto inicial. El gobierno prevé contener el gasto en Seguros de Salud hasta el +3,2%, gracias al ahorro en el gasto en medicamentos, laboratorios de análisis e incluso bajas laborales. Los senadores habían eliminado este objetivo de gasto, según lo juzgado «insincero».
El Senado aún encontrará algunas de sus medidas en el texto final, como el control de la contribución al plan complementario de pensiones Agirc-Arrco.