El gigante del gas ruso Gazprom anunció el sábado que suspendió las entregas de gas a Letonia, en medio de las tensiones ruso-occidentales debido al conflicto en Ucrania y las sanciones europeas sin precedentes contra Rusia.
«Hoy, Gazprom suspendió sus entregas de gas a Letonia (…), debido a la violación de las condiciones de extracción de gas», dijo la empresa rusa en un comunicado en Telegram, sin más detalles.
Este anuncio viene como gazprom redujo drásticamente sus entregas de gas ruso a Europa a través del gasoducto Nord Stream esta semana, citando la necesidad de mantenimiento de una turbina, ya que los países europeos se esfuerzan por llenar sus reservas para el invierno.
Rusia ya había reducido su volumen de entrega dos veces en junio, diciendo que el oleoducto no podía funcionar normalmente sin una turbina que estaba siendo reparada en Canadá y que no había sido devuelta a Rusia debido a las sanciones impuestas por los occidentales tras el ataque ruso a Ucrania.
Gas, ¿un arma energética?
Desde, Alemania y Canadá acordaron enviar el equipo de regreso a Rusia, pero la turbina aún no ha sido entregada.
Los occidentales acusan a Moscú de utilizar el arma energética en represalia por las sanciones adoptadas tras la ofensiva contra Ucrania.
El Kremlin asegura por su parte que las sanciones están en el origen de problemas técnicos de la infraestructura gasista y que Europa está sufriendo por lo tanto, las medidas que impone a Rusia.
Rusia ha sido golpeada con varias rondas de sanciones occidentales después de su intervención militar en Ucrania lanzada el 24 de febrero.
Las exportaciones de gas ruso a Europa, en particular a Alemania e Italia, han disminuido de manera constante desde el inicio de estas sanciones. Gazprom también interrumpió sus entregas de gas a varios clientes europeos que se negaron a pagar en rublos.