Conseguir que el estudio aprobara a Giger requirió algo de convencimiento, ya que a los ejecutivos de Fox les preocupaba que su trabajo fuera «obsceno». Afortunadamente, Scott los convenció de que eso era justo lo que necesitaban.
«Cuando iba a hacer ‘Alien’ había visto un libro llamado ‘Necronomicon’ y tenía una imagen maravillosa, que en efecto era el Alien. Fox no estaba seguro de eso en ese momento y dijeron que era obsceno y oscuro y dije, ‘obsceno y oscuro es bueno, estamos a punto de hacer una película de terror, amigo'».
Giger, aunque no era conocido por su trabajo en el cine, alcanzó logros notables a finales de los años 70. Había expuesto su arte en todo el mundo, tenía varios libros a su nombre e incluso había diseñado varias portadas de álbumes. Su estilo gótico «obsceno» resultó ser perfecto para la oscura aventura espacial de Scott. Lo más importante es que Giger es responsable del mortal extraterrestre de la película, el Xenomorfo. En un artículo de Express de 2014 publicado en torno a su fallecimiento, se citó al artista diciendo lo siguiente sobre su creación:
«Es elegante, rápido y terrible. Existe para destruir y destruye para existir… Una vez visto, nunca será olvidado. Permanecerá con las personas que lo han visto, tal vez en sus sueños o pesadillas, durante mucho, mucho tiempo. tiempo. Quizás para siempre.»
Una afirmación audaz, por supuesto, pero sería difícil argumentar, en retrospectiva, que está equivocado. Las maneras macabras de Giger impregnaron el set, y el artista recibió huesos reales en el set para ayudar a crear el aspecto de la película. «Habían estado en casas de suministros médicos, mataderos y Dios sabe dónde más, y al día siguiente el estudio estaba lleno de huesos y esqueletos de todas las descripciones posibles», recordó una vez una fuente anónima. «Entrabas al estudio de Giger y veías a este tipo que parecía el Conde Drácula, vestido todo de cuero negro, con su cabello negro, su piel blanca como un lirio y sus ojos llameantes».