Con la hermana francesa André, ha muerto la persona más anciana del mundo. La monja tenía 118 años, como escribió el alcalde de su ciudad de Toulon, en el sur de Francia, en Facebook el martes por la noche.
Durante la pandemia, la anciana Lucile Randon también sobrevivió a una infección por Covid. En la foto durante una entrevista televisiva en febrero de 2021.
(dpa) La hermana André murió en la noche del lunes al martes en el hogar de ancianos, informó la agencia de noticias francesa AFP, citando al portavoz de la mujer nacida como Lucile Randon.
Desde finales de abril del año pasado, el Grupo de Investigación en Gerontología catalogó a la hermana André como la persona viva de mayor edad, anteriormente como la europea de mayor edad. Con su muerte, María Branyas Morera, de 115 años y residente en España, es ahora la persona más longeva del mundo en el ranking de la Asociación de Investigadores.
Sor André nació el 11 de febrero de 1904 en Alès. La mujer francesa trabajó como tutora en su juventud y solo ingresó a una orden religiosa a los 40 años. Más recientemente, la hermana André estaba en silla de ruedas, no había podido ver bien durante varios años. Es ciudadana de honor de la ciudad de Toulon, donde ha vivido en la casa durante varios años. El alcalde Falco la elogió como «increíblemente moderna» y una «monja con un gran corazón».