La película se centra en un grupo de reclutas del ejército de osos de peluche, en particular Bluey, su sensible hermano Tubby y el rival al estilo «Top Gun» de Bluey, mientras pasan por un campamento de entrenamiento antes de ser enviados a una misión de rescate para encontrar a los camaradas desaparecidos. Muy pronto, las cosas se van al infierno y los osos se encuentran con reptiles venenosos, gusanos alucinógenos, primates enojados y mucha muerte, cuando se dan cuenta de que esta es una guerra sin ganadores ni ternura.
«Unicorn Wars», al igual que «Birdboy: The Forgotten Children», tiene una animación impresionante que encaja con la historia que se cuenta. Mientras que «Birdboy» tenía un aspecto más tosco y dibujado a mano para reflejar su mundo al borde de la destrucción, «Unicorn Wars» se ve más limpio y pulido, atrayendo al público con su tierno aspecto digno de su elenco de osos de peluche. El uso de colores brillantes y fondos pintorescos ayuda a vender una película inofensiva y apta para niños antes de que se desate el horror. Al igual que el excelente programa de anime reciente «Ranking of Kings», Vázquez utiliza el medio de la animación y su asociación con el entretenimiento infantil para contrastar con la horrible historia que está contando, la yuxtaposición de lindos ositos de peluche mutilados y unicornios masacrados como parte de la apariencia de la película.
Y, sin embargo, aunque su premisa fácilmente podría ser poco más que un truco, una película con escenas violentas retorcidas pero hilarantes y poco más, «Unicorn Wars» apunta a más. Hay momentos de comedia absurda y muy sombría, pero en su mayor parte esta es una película de terror de guerra, una exploración del fascismo y el fanatismo religioso entre «Bambi» y «Apocalypse Now» que aún presenta muchos penes y tripas de osos de peluche. Vázquez interpreta los elementos de la guerra de manera completamente directa, golpeando algunos comentarios conmovedores antes de volver a los penes de los osos de peluche.