Según Williams, el creador de «Happy Days», Gary Marshall, creó a Mork por sugerencia de su hijo, a quien acababa de sorprenderle una película de fantasía de ciencia ficción poco conocida llamada «Star Wars». Marshall siguió con la idea y comenzó a audicionar a comediantes para el papel. Cuando habló con Pioneers of Television, Williams recordó su experiencia audicionando para el papel:
«Entré y básicamente comencé a hablar con una extraña voz de helio, me senté en la cabeza y comencé a jugar porque dije ‘¿qué tienes que perder?’ Y dijeron, ‘Sí’. Y dije ‘¿En serio?’ Así que conseguí el trabajo».
Después de aparecer en dos episodios de «Happy Days», a Mork se le dio su propio programa, «Mork and Mindy», donde el público pudo probar por primera vez a Robin Williams como protagonista. «Happy Days», ideal para toda la familia, le dio a Robin Williams su gran oportunidad, pero como comediante, prefería el material más travieso. Y allá por el 78, los censores siempre estaban mirando y escuchando. Sin embargo, Williams encontró una forma astuta de pasarles material a escondidas.