Esto podría verse fácilmente como algo universal sobre el heroísmo, o incluso como un discurso que May le está dando a Peter como ejemplo. O, y ciertamente lo parece, ella sabe que Peter es Spider-Man, sabe que él está contemplando renunciar al trabajo de superhéroe y está tratando activamente de convencerlo de que vuelva.
Por supuesto, si May sabía que Peter era en secreto Spider-Man, y que ser Spider-Man era una gran fuente de estrés para Peter, ¿por qué no dijo nada? Seguramente podría haberle dicho a Peter: «Sé que tienes un segundo empleo como vigilante disfrazado, por lo que cualquier presión que sientas sobre ocultarme ese secreto ahora puede desaparecer». En cambio, fingió ignorancia, sin dejar entrever que sabía la verdad.
May, sin embargo, es respetuosa. Spider-Man era el secreto a guardar de Peter, no su misterio a resolver. Respetaba a su sobrino lo suficiente como para dejar que lo manejara de la manera que mejor le pareciera. Ya no es un Spider-Boy, May respetó la madurez de Peter y los intentos de convertirse en un Spider-Man. Uno podría muy bien compararlo con salir del armario con un padre. Un padre puede saber que su hijo es homosexual, pero no es el trabajo de los padres sacar a su hijo, incluso de una manera positiva. Salir del armario es un viaje personal para el niño en cuestión, y depende de los padres esperar hasta que estén listos para compartir. Luego, abrazarlos, amarlos y celebrarlos cuando lo hagan. May no quería sacar a Peter. Eso es 100% comprensible.
En la continuidad de «Spider-Man» de Sam Raimi, ella era una figura paterna impecable, allí para ofrecer tranquilidad con calma y presentarse como alguien que valía la pena proteger.
Personalmente, creo que ella lo sabía.