El fundador de FTX, Sam Bankman-Fried (SBF), fue enviado a la cárcel el viernes después de que el juez que supervisaba su caso revocara su fianza. El juez de distrito de EE. UU. Lewis Kaplan encontró causa probable de que el ex director general caído en desgracia manipuló repetidamente a los testigos. Además, Kaplan rechazó la solicitud de los abogados de Bankman-Fried de retrasar su detención pendiente de apelación.
Los fiscales argumentaron que Bankman-Fried intentó acosar a un testigo crucial el mes pasado cuando le mostró a un reportero del New York Times los escritos personales de su ex socia Caroline Ellison, una testigo colaboradora que se declaró culpable en diciembre de cargos penales relacionados con defraudar a los inversores de FTX. La fiscalía dijo que las acciones de SBF fueron un intento de dañar su reputación e influir en los posibles jurados. Mientras tanto, el equipo de defensa de SBF acusó a los fiscales de usar pruebas cargadas de “insinuaciones, especulaciones y escasos hechos”. El juez Kaplan se puso del lado de los fiscales y dijo que Bankman-Fried intentó “manipular a los testigos al menos dos veces”.
Reuters informa que el exjefe de FTX, de 31 años, fue sacado de la corte por alguaciles estadounidenses “después de quitarse los cordones de los zapatos, la chaqueta y la corbata y vaciar sus bolsillos”. El exdirector ejecutivo había estado bajo arresto domiciliario en California (en la casa de sus padres en Palo Alto) desde que fue extraditado en diciembre tras su arresto en las Bahamas el pasado mes de diciembre. Su paquete de fianza de $250 millones controlaba estrictamente su uso de Internet.