La mayoría de las personas no usan sus teléfonos celulares por la noche y los dejan en la mesita de noche mientras duermen, ya sea en modo de espera o con el cargador.
Los tiempos de carga demasiado largos, por ejemplo durante la noche, dañan las baterías de iones de litio y reducen su capacidad. E incluso si el teléfono inteligente no está conectado al cargador, sino que está sobre la mesita de noche en modo inactivo, sigue consumiendo electricidad. Esto sucede debido a que las aplicaciones se ejecutan en segundo plano o porque el teléfono está constantemente conectado a la torre celular. El resultado: el teléfono móvil debe cargarse más a menudo.
Es mejor simplemente apagar el celular para ahorrar batería y así alargar la vida del smartphone.