Tus peores historias de viajes por carretera con una mascota


Navidad 1987. Realicé un viaje familiar en la casa rodante al norte de Cali para celebrar con mis abuelos. Nada inusual allí, pero el día que llegamos, un gato callejero apareció en su puerta. Clima frío, gatito muy hambriento, para resumir, lo adoptamos. En el camino de regreso a casa, la casa rodante estaba fallando mucho. No es gran cosa, pero un gatito un poco asustado, hasta que llegamos a Eugene. MASIVO contraproducente, así que nos detuvimos para revisar las cosas. El silenciador ahora tenía tres veces su diámetro normal, con una gran rasgadura en el costado. Después de cojear la casa rodante hasta el camino de entrada de la familia en la ciudad y de sacar al gato del techo, nos acostamos y reemplazamos el silenciador al día siguiente. Regresa al día siguiente y llega a una parada de descanso al sur de Portland. Yo siendo 17, mis padres me preguntaron si quería conducir. ¿Seguro Por qué no? Comience, alcance casi la velocidad de la autopista y la parte delantera de la casa rodante comienza a temblar y rebotar por todas partes. Deténgase en el arcén, asegurándose de que mis padres sepan que no hice nada malo. Echa un vistazo a las cosas, no puedo ver lo que está pasando. Avance un poco y uno de mis padres nota que la rueda delantera derecha no gira. Llegue al final de una vía de acceso, baje por ella y diríjase a una estación de servicio a una cuadra de distancia. Papá los convence de que le dejen usar sus herramientas y el garaje, y 5 horas más tarde (con MUCHA maldición incluida), finalmente se da por vencido y llama a una grúa. El primer lugar al que lo llevan le da una mirada y unos 5 minutos y dice que no pueden hacer nada al respecto. Haz que te remolquen a un taller de reparación de camiones que atiende las 24 horas y lo intentarán. Casi 20 horas de trabajo después, nos avisaron que los rodamientos se habían desintegrado, y soldaron el buje al eje. Toda esta actividad con un nuevo gatito que vivió hasta los 18 años y fue uno de los gatos más relajados que jamás hayas visto. A menos que hayas amenazado a sus perros, él se enfrentaría cara a cara con cualquier perro. Pero esa es otra historia.

Enviado por: Phydeaux



Source link-50