Fotografía del cartel de Matilda fuera del teatro de Cambridge, Deanne McIntosh The Charter School North Dulwich
(Imagen: Teatro Cambridge)
Poco más de 12 años desde que salió el original en 2010, Matilda the Musical se está fortaleciendo, entreteniendo a millones. Si bien la versión de Netflix aún no se ha lanzado, su presentación teatral en vivo en el West End sigue siendo icónica y nostálgica.
Como se trata de un musical, se presentó al público una canción titulada ‘Miracle’, ya de por sí divertida, brillante e interactiva, con Lavender corriendo por el pasillo durante la canción. Matilda luego subió al escenario como un ratón de biblioteca inteligente e ingenioso que realmente no se lleva bien con su familia. Su amor por los libros y las historias fue interesante cuando, sin saberlo, contó la historia de la Sra. Honey, su maestra, al bibliotecario, que reveló el oscuro pasado de Honey a lo largo de la obra.
Matilda the Musical fue una actuación espectacular y llamativa que tenía muchas canciones y números de baile como ‘Naughty’, ‘School Song’ y ‘When I Grow Up’. Fue alegre y contó con muchos chistes que hicieron reír al público. ¡La audiencia incluso se sorprendió con el icónico y más memorable lanzamiento de martillo de Trunchbull de Amanda Thripp con sus coletas! Los espectadores podían sentirse como si fueran parte del espectáculo, ya que se arrojaban confeti y aviones de papel a la audiencia; También se animó a los artistas a aplaudir durante la canción final.
La producción ha hecho un trabajo increíble con la escenografía, el escenario estaba cubierto de cubos de madera con letras del alfabeto y luces de neón. Definitivamente establecer un entorno institucional. El decorado fue muy detallado, incluía escenas de la casa de Wormwood, la escuela y la biblioteca. Las transiciones entre cada escena fueron fluidas, casi imperceptibles, ya que el elenco trabajó en conjunto para recrear rápidamente un escenario con accesorios y paredes automáticas.
En general, Matilda the Musical fue una actuación agradable tanto para el público mayor como para el más joven al recordarles su propia infancia a los adultos y crear un nuevo recuerdo para los niños. Terminó con la icónica pose de ‘superhéroe’ de Matilda como un espectáculo muy memorable para muchos espectadores.