Un número significativo de pequeñas y medianas empresas han sufrido un ransomware (se abre en una pestaña nueva) ataque en los últimos 12 meses, muestran nuevas estadísticas de los expertos en ciberseguridad de Avast.
La empresa encuestó recientemente a 1000 pymes y descubrió que el 26 % había sido víctima del temido delito cibernético. De ese número, casi la mitad (47 %) decidió pagar la demanda de rescate para recuperar sus datos y el acceso a sus terminales.
A pesar de pagar las demandas, las consecuencias siguen siendo dolorosas: cuatro de cada diez (41 %) perdieron datos valiosos en el proceso, mientras que un tercio (34 %) perdió el acceso a sus dispositivos.
Copia de seguridad de datos confidenciales
El lado positivo del informe es que la conciencia sobre la ciberseguridad es relativamente alta. Aproximadamente la mitad (48 %) de las empresas encuestadas perciben los ciberataques como sus mayores amenazas, seguidas de la seguridad física (35 %) y los problemas de la cadena de suministro (33 %). La mayoría de las empresas (69%) cree que tiene suficiente información para protegerse contra este tipo de ataques, y el 76% dijo que ya ha “tomado medidas” al respecto. Aunque, les encantaría obtener más apoyo del gobierno.
La copia de seguridad de los datos parece ser una prioridad en la agenda de todos, ya que el 63 % de las empresas encuestadas lo hace al menos una vez a la semana.
Avast también preguntó a los encuestados sobre los efectos de la guerra ruso-ucraniana en la ciberseguridad y obtuvo resultados bastante interesantes.
Resultó que la guerra actuó como un catalizador adecuado para la guerra cibernética, ya que el 68 % de las pymes ahora están más preocupadas por los ataques cibernéticos que antes de la invasión. De hecho, se preocuparon tanto por la seguridad cibernética que aumentaron sus gastos en seguros cibernéticos, a pesar del aumento generalizado de los costos.
“Los resultados de esta encuesta resaltan el problema, particularmente en relación con el ransomware, que gran parte de la población de pequeñas empresas no está bien equipada para manejar. A menudo terminan pagando rescates sin ninguna garantía de que recuperarán sus datos. Esta es la situación más triste, pero la buena noticia es que, a diferencia de las organizaciones más grandes, las pequeñas empresas pueden ser rápidas, ágiles y aprovechar la falta de burocracia para planificar antes de que ocurra una crisis”, comenta Lindsey Pyle, vicepresidenta de estrategia de Avast. Negocio.
“Las PYMES deben utilizar estas fortalezas para prepararse y establecer un plan que, como mínimo, debe incluir la implementación de copias de seguridad en línea y fuera de línea, la instalación de un antivirus, la configuración de la supervisión de la red y la garantía de que se establezca un régimen de parches automatizado”.