Mientras que su ex esposa, Amber Heard, continúa afirmando que él abusó de ella, la golpeó y la insultó, Johnny Depp cuenta una historia diferente. Afirma que nunca ha golpeado a una mujer, incluida su ex. En cambio, hubo discusiones verbales, también instigadas por la actriz. Ella, por su parte, afirma que él se convirtió en un «monstruo» bajo la influencia de drogas y pastillas y que no tenía el control. Se habla de discusiones violentas, en las que incluso se dice que perdió la yema del dedo.
No está claro quién dice la verdad aquí. Será interesante ver qué detalles de su matrimonio tóxico sacará a la luz el juicio y quién saldrá victorioso de la sala del tribunal. Hasta entonces, declaración se opone a declaración. (cc)