La inteligencia artificial está conquistando el mundo de las oficinas, hasta ahora relativamente protegido de la automatización, y compite con redactores, diseñadores gráficos e informáticos. El mundo profesional cambiará enormemente, pero no nos quedaremos sin trabajo.
Chat-GPT, el sistema de inteligencia artificial (IA) que puede generar respuestas a una infinidad de preguntas difíciles en cuestión de segundos, podría convertirse en la «calculadora de la escritura». Al menos eso es lo que piensa Erik Brynjolfsson, profesor del Instituto de Inteligencia Artificial Centrada en el Ser Humano de la Universidad de Stanford y director del Laboratorio de Economía Digital de Stanford.