“La fantasía de un recurso hídrico eternamente disponible”


Ddefinir un rectángulo de 50 metros por 25, es decir aproximadamente la superficie de una piscina olímpica. En este derecho de paso, cava, cava de nuevo y no te detengas hasta que hayas alcanzado una profundidad de 5 kilómetros. El volumen así liberado corresponde a dos veces y media la pirámide de Keops: esta es la cantidad de agua que debería extraerse cada año de las aguas subterráneas, para llenar las dieciséis megacuencas del proyecto liderado por la Coop de l’eau. des Deux-Sèvres, y que debe bordear el sur y el este del Marais poitevin. más de veinte otros ya están en su lugar, dispersos en el norte de este gran humedal.

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A pesar de la escala de la operación, las alteraciones irreversibles y considerables que provocará en los paisajes y la hidrografía de toda una región, los daños que podría inducir en los ecosistemas costeros por la reducción de la mansedumbre de las aguas, la mano de comunidades y gobierno no tiembla. «El Estado apoya el proyecto»repetía la secretaria de Estado de Ecología, Bérangère Couillard, el pasado 10 de enero, ante el Senado.

Al final de una sucesión de elementos de lenguaje tan esperados y tan huecos que se vuelven cómicos – “transición agroecológica”, “marco de consulta colectiva”, “gestión sostenible y equilibrada de los recursos”, etc. –, Ma mí Couillard aprovechó la » estudios científicos « dando fe de los beneficios del proyecto, con referencia al informe emitido en junio de 2022 por la Oficina de Investigaciones Geológicas y Mineras (BRGM).

Nivel freático muy bajo

Para entenderlo, hay que saber que el informe en cuestión efectivamente concluye que el bombeo de 6,2 millones de metros cúbicos en los acuíferos, en otoño e invierno, permitirá (sin entorpecer su recarga) almacenar en la superficie los «excesos » agua. Esto se puede usar en verano para riego, reduciendo así el bombeo de verano. Sin embargo, en esta región, los cursos de agua están estrechamente relacionados con las aguas subterráneas y dependen en gran medida de su nivel. Conclusión del BRGM: entre junio y agosto, gracias a las cuencas, los mantos freáticos se conservarán y los arroyos mejorarán por ello. Los regantes regarán, los ríos fluirán: será grande.

¿Irán las cosas de acuerdo con este escenario de cuento de hadas? Hoy, solo una de las dieciséis cuencas previstas está operativa, en Mauzé-sur-le-Mignon. Y el llenado de este único embalse ya es problemático: el nivel de la napa freática, que se supone que se recargará de forma sostenida gracias a las lluvias otoñales, es tan bajo que se tardó hasta mediados de diciembre en empezar a llenar la cuenca. Las asociaciones de defensa del medio ambiente creen que era demasiado pronto para comenzar a bombear, ya que el flujo del Mignon aún es pequeño.

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