Según se informa, una de las startups de Hyperloop más antiguas está cerrando sus puertas. Hyperloop One, que alguna vez estuvo respaldado por Virgin Group de Richard Branson, dejará de operar el 31 de diciembre según Bloomberg News.
Es el último tropiezo en el intento de la industria tecnológica de darle vida a una idea que Elon Musk presentó por primera vez en un libro blanco en 2013. Y se produce después de que Hyperloop One recaudara y gastara cientos de millones de dólares desde su fundación en 2014.
El discurso original del Hyperloop suena como un sueño febril de tasa de interés cero: construir largos tubos sellados al vacío para transportar personas y mercancías a velocidades súper altas. Sin embargo, aparte de un puñado de demostraciones técnicas y pistas de prueba, la idea aún no ha despegado.
El propio Hyperloop One pasó por múltiples mutaciones, incluida una fea pelea legal entre sus cofundadores. Tomó el nombre de Virgin Hyperloop One después de que Branson invirtiera en 2017. Pero cuando Branson criticó a Arabia Saudita tras el asesinato de Jamal Khashoggi en 2018, el Reino canceló un proyecto planeado con la startup y el multimillonario renunció como presidente.
El operador portuario de Dubai, DP World, terminó con el control mayoritario de la startup y centró su atención en la carga a principios de 2022, recortando a la mitad del personal en ese momento y abandonando el apodo de Virgin. DP World terminará con la propiedad intelectual de Hyperloop One, informa Bloomberg, mientras que el resto de sus activos físicos, incluida una pista de pruebas en las afueras de Las Vegas y otra maquinaria, se venderán.