Sabiendo que no podía beneficiarse legítimamente de la película, Spielberg fundó la USC Shoah Foundation para crear conciencia y hacerse eco de las voces de quienes experimentaron el Holocausto y otros genocidios de primera mano. «La lista de Schindler» ganaría siete premios de la Academia, incluido el primer Oscar al «Mejor director» de Spielberg, honrándolo a él y a su obra entre sus compañeros. Los riesgos de Spielberg dieron sus frutos en el momento más importante de su carrera.
Sin embargo, hay una característica distintiva que Spielberg mantuvo con él durante la creación de «La lista de Schindler», y continúa diferenciándolo incluso sin sus dispositivos característicos y sus sofisticados trucos de cámara. En «Spielberg» de HBO, Ralph Fiennes describe su esencia a la perfección: «No diría que es un director intelectual. Creo que siente y piensa de manera intuitiva y emocional».
La madurez emocional de Spielberg prevalece, incluso en sus películas más oscuras, porque sabe cómo dirigir esa energía a su audiencia. Cuando «The Fabelmans» llegue más tarde este año, será interesante ver cómo el sentimentalismo de Spielberg prospera en una narrativa autobiográfica. Su autoconciencia solo se vio fortalecida por su experiencia de regreso a lo básico en «La lista de Schindler».