Waymo de Alphabet emitió su segunda ronda de despidos este año, confirmó la compañía a TechCrunch. Combinado con los recortes iniciales en enero, la empresa de tecnología de conducción autónoma ha despedido al 8%, o 209 empleados, de su fuerza laboral.
Los despidos, en su mayoría puestos de ingeniería, son parte de una reestructuración organizacional más amplia que sigue un «enfoque fiscalmente disciplinado», según un portavoz de Waymo. En otras palabras, la empresa está recortando costos donde puede mientras continúa desarrollando e implementando su tecnología. Waymo está en el camino hacia la comercialización de la tecnología de vehículos autónomos, pero el camino por recorrer es largo y la empresa aún no genera muchos ingresos para financiar sus operaciones.
Los despidos de Waymo siguen a una oleada de recortes en Alphabet y Google en enero. Alphabet se encuentra entre las muchas empresas estadounidenses que reducen su personal antes de una recesión inminente. Algunos analistas e inversores dicen que los despidos de Waymo no son simplemente producto de un mercado a la baja. La empresa ha recibido una importante inversión de su empresa matriz, y el inversor activista TCI Fund Management dijo en noviembre que Waymo aún no ha justificado ese gasto.
La noticia de más despidos llega la misma semana en que Waymo anunció planes para comenzar a probar vehículos totalmente autónomos, es decir, sin un operador de seguridad humano detrás del volante, en Los Ángeles. Escalar su servicio de robotaxi a nuevas ciudades es clave para la estrategia de comercialización de Waymo y, por lo tanto, su potencial para proporcionar un buen retorno de la inversión. Sin embargo, es probable que a la compañía aún le falten años para obtener suficientes ingresos para cubrir su consumo de efectivo.
Waymo le dijo a TechCrunch que la compañía se encuentra en una posición sólida con un camino claro a seguir y una inmensa oportunidad para aprovechar. Un portavoz se refirió al crecimiento de las operaciones de Waymo en San Francisco y a la expansión de las operaciones comerciales en Phoenix como prueba de la capacidad de la empresa para desarrollar, implementar y comercializar su tecnología de conducción autónoma.